Los invito a un viaje a un pueblo único, donde se funden las culturas chilena, mapuche e italiana. A vivir la magia de Capitán Pastene, famosa por sus tradiciones y sobre todo por sus genuinos sabores italianos. Recomendamos visitar este lugar o recrear su atmósfera en casa con algunos sabrosos tips de comida y vinos.
Capitán Pastene se encuentra en la región de la Araucanía, en un paisaje dominado por la Cordillera de Nahuelbuta. En el hermoso Parque Nacional Nahuelbuta y el Monumento Natural Contulmo subsisten los únicos bosques costeros de araucarias de Chile, además de diversas especies endémicas de nuestra flora y fauna. Hoy esta zona es famosa también por la mágica fusión de aromas y sabores italianos, chilenos y mapuches.
Ubicado a 120 km al noroeste de la ciudad de Temuco y a 10 kilómetros de la localidad de Lumaco, viajando desde Traiguén hacia la costa, se encuentra este mágico pueblo. Desde Angol es posible llegar en buses con salidas diarias. El camino es muy romántico, trazado en una ruta rodeada de bosques. Al llegar, inmediatamente se divisan las profundas raíces de su gente, con las banderas chilena e italiana flameando en su municipio.
Capitán Pastene es el pueblo que ilustra y representa la migración italiana con sus tradiciones que se han mantenido inalterables hasta nuestros días. La mayoría de los colonos proviene de la región italiana Emilia-Romagna y eso se refleja en sus costumbres y tradiciones culinarias. El nombre del pueblo recuerda al capitán genovés Giovanni Battista Pastene, quien exploró las costas chilenas bajo la autoridad de Pedro de Valdivia en el siglo XVI.
Las tradiciones europeas de este lugar destacan principalmente en su arquitectura con fuentes de agua, glorietas, iglesias y bodegas. Varias casas recuerdan la época de los primeros colonos: 88 familias que llegaron en 1904 y 1905 en dos migraciones sucesivas, para dedicarse inicialmente a la agricultura y luego a las labores forestales.
Las tradiciones italianas se manifiestan con los sabores de su cocina. Aquí se pueden visitar las fábricas de pastas y comprar ricos embutidos, pero sobre todo probar la mano de sus mismos creadores, quienes conservan las recetas originales traspasadas de generación en generación. La calidad es sorprendente y les aseguro que la hospitalidad de su gente los hará volver.
Al igual que los jamones italianos, los productos elaborados en este lugar tienen denominación de origen. Su especialidad es un jamón de pierna trasera de cerdo crudo, salado y ahumado en leña, cuya maduración se realiza de 12 a 30 meses bajo el aire frío de la Cordillera de Nahuelbuta, lo que permite su uso por tiempo prolongado sin pérdida de humedad, y sin adición de ningún preservante. La técnica de elaboración proviene de una receta tradicional del norte y centro de Italia, que fue llevada a Chile por los fundadores de la localidad. Su característico sabor ahumado está marcado por notas de árbol nativo y especias locales. Sus restaurantes ofrecen una amplia variedad de pastas y salsas. Muchas recetas se encuentran en la frontera de las culturas. Por ejemplo, la pasta y la salsa boloñesa provienen de la península italiana, pero son enriquecidas con setas del bosque nativo y avellanas tostadas, muy características de la comida mapuche. Además los restaurantes cuentan con bodegas donde ustedes pueden comprar pastas secas, frutas en conserva, mermeladas y sobre todo el famoso prosciutto de Capitán Pastene.
No olviden después de almuerzo visitar alguna fábrica de prosciutto, donde pueden ver jamones colgando de las vigas de las construcciones de adobe, olerlos (un rico aroma ahumado) y escucharlos (gotas de grasa y agua goteando de techo). Este jamón, junto con quesos, tomates secos y pan ciabatta representan un plato muy italiano que es el acompañamiento perfecto para celebrar un buen vino como Casillero del Diablo Reserva Privada Cabernet Sauvignon. Sin embargo, el jamón prosciutto también es un rico ingrediente para cocinar. Pueden preparar una salsa para pasta, agregarlo a una pizza, utilizarlo en un sándwich o ensalada, o bien usarlo en una frittata o quiche. Su imaginación es el límite para las recetas.
Hoy les quiero presentar una preparación muy fácil: mi versión de una clásica saltimbocca. La receta está preparada con pechuga de pollo (en lugar de ternera) y jamón prosciutto de Capitán Pastene. Este plato, que se puede cocinar en menos de una hora, ofrece una gran complejidad de sabores (salado del jamón, herbal de la salvia y cremoso de la salsa) y texturas (jugo de la carne y la crujiencia del jamón).
Para disfrutar al máximo esta receta destapen Trio Chardonnay, un vino fresco, pero complejo al mismo tiempo. Estoy segura de que con este plato ustedes podrán sentir el verano italiano bajo el cielo azzurro.
Saltimbocca
Ingredientes para 4 personas
- 2 pechugas de pollo
- 8 hojas de salvia
- 4 láminas de jamón prosciutto
- 2 dientes de ajo
- 200 ml vino blanco
- 40 gr de mantequilla
- 2 cucharadas de aceite de pepa de uva
- Sal, pimienta
- Limón
Preparación
- Preparar los trozos de carne: cortar la pechuga en 4 porciones, aplanar un poco (esta operación les servirá para romper las fibras de la carne). Sazonar con sal y pimienta negra recién molida.
- Sobre cada pieza de pechuga de pollo poner dos hojas de salvia fresca.
- Envolver cada pieza en una lámina de jamón.
- Calentar aceite y mantequilla en un sartén grande a fuego alto. Agregar los dientes de ajo enteros y dorar hasta que regalen su aroma al aceite y luego sacarlos. Agregar las piezas de pollo envueltas en jamón y cocinar hasta que estén doradas, alrededor de 2 minutos por cada lado.
- Añadir el vino blanco. Llevar el líquido a ebullición. Reducir el fuego a medio. Tapar y cocinar a fuego lento hasta que el pollo esté cocido, alrededor de 8 ó 10 minutos.
- Transferir el pollo a un plato y cubrirlo para que no se enfríe. Cocinar el líquido de cocción a fuego alto hasta que se reduzca, aproximadamente 5 minutos. Sazonar el líquido de cocción con sal y pimienta a gusto.
- Servir la saltimbocca: la salsa de cocción reducida sobre el pollo, junto con papas cocidas y porotos verdes, además de una lámina de limón.