Continuamos analizando el vino junto a la sommelier mexicana Claudia Juárez, quien en esta oportunidad nos detalla la forma en que debemos apreciar el vino a partir de los aromas que encontraremos en cada copa.
Esta es una de las etapas más subjetivas, ya que la memoria olfativa es distinta en cada persona.
Para comenzar, debemos acercar el vino a la nariz y comprobar que éste sea agradable y que encontremos aromas (cualidades) y no olores (defectos).
Después, ir de lo general a lo particular, es decir, englobar el vino en grupos aromáticos, si es frutal, floral, herbal, vegetal o especiado y posteriormente, tratar de encontrar el máximo de aromas que podamos de acuerdo a nuestra capacidad olfativa, sin olvidar que la nariz es un músculo que debemos de ejercitar, así que entre más juguemos con ella, mayor cantidad de aromas podremos percibir.
Y por último, catalogar si el vino fue agradable, elegante o complejo.