Concha y Toro

Ania Smolec 13/09/2019

Lifestyle

¿Cómo ven los extranjeros las fiestas patrias de Chile?

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El 18 de septiembre es la fecha más importante para todos los chilenos. Este día se celebra el Día de la Independencia. La gente participa en fiestas y ramadas, pero sobre todo se come muy rico.

El 18 de septiembre de 1810 se formó la primera Junta de Gobierno, el paso decisivo para comenzar a sellar la independencia de España. No solo es un hito político, sino para turistas y extranjeros que viven en Chile, el Dieciocho es una gran oportunidad para conocer las costumbres chilenas. 

Este día se puede sentir el lado más alegre de los chilenos. Las ciudades y pueblos preparan sus fondas, humedecen los pisos de tierra para bailar cueca (el baile nacional, que seduce con sus preciosos y coloridos vestidos), corren en sus caballos los hombres de campo en los rodeos, reviven los juegos tradicionales como la rayuela y se encienden las parrillas para hacer asados y calentar las jugosas empanadas. También se puede disfrutar de algunos nuevos sabores como el famoso cóctel Terremoto (vino blanco rústico, helado de piña y granadina), pero sobre todo comer muy rico.

Las fiestas en familia o entre amigos parten muy temprano con algunas deliciosas cosas para picar. Llegan los ceviches de pescados y mariscos, que se disfrutan mejor con una copa de un frío Casillero del Diablo Sauvignon Blanc. Después se sirven machas a la parmesana (machas en su concha gratinadas con queso Parmesano y mantequilla y/o crema). Son una delicia con Casillero del Diablo Chardonnay para subrayar su opulencia y cremosidad. 

Ph: tasteatlas.com

En Chile se disfrutan las empanadas durante todo el año, pero en las Fiestas Patrias es un ritual casi obligatorio. Para los chilenos la empanada de pino de horno es una receta emblemática. El pino es una preparación muy chilena, quizás la base de su cocina, y se prepara principalmente con carne picada con cuchillo (a veces molida), cebolla cortada en cubos, ají de color y una pizca de comino. Para la empanada tradicional de pino también se agregan otros ingredientes, como huevo duro cortado en rodajas, pasas de uva y aceitunas negras enteras. 

Empanada_Final
Ph: polinenlacocina.cl

Para mí, la empanada, tan contundente y enjundiosa, es un plato principal, acompañada con un poco de ensalada chilena de tomate y cebolla. Para otros sólo es la antesala del gran asado diechiochero. Este jugoso y sabroso relleno nos invita a un maridaje con vino tinto. El óptimo compañero será Casillero del Diablo Carmenere, un vino de cuerpo mediano, con taninos suaves y bien marcada jugosidad. Además, no olviden que el Carmenere es una de las cepas emblemáticas de Chile, por lo tanto, este maridaje tiene un doble sentido en Fiestas Patrias. Es muy emocionante, y no sólo para los chilenos, tomar una con una mano la empanada recién salida del horno y en la otra mano una copa de un delicioso y jugoso vino tinto. 

En Chile es imposible imaginar las Fiestas Patrias sin una parrilla. Además de representar una gran celebración, es una aventura combinar distintos cortes y tipos de carne con los vinos. El ritual comienza con diferentes tipos de preparaciones y embutidos. El primer paso después de la empanada, es un choripán (pan con chorizo). A mí me encanta con Casillero del Diablo Carmenere o Casillero del Diablo Shiraz. Más tarde vienen de la parrilla algunas longanizas y prietas que podemos disfrutar con el mismo vino. 

asado_Final (1)

Las carnes estrellas del asado tienen mayor grasa infiltrada y estructura, como lomo vetado o asado de tira, por lo tanto, necesitan un compañero que esté a su altura como Casillero del Diablo Cabernet Sauvignon, un tinto con cuerpo, con personalidad, pero también con la suficiente acidez para fundirse con los abundantes jugos de los cortes. 

¿Y postres de 18 de septiembre? Chile es famoso por su amplia gama de dulces en base de manjar (una pasta dulce de azúcar y leche condensada de color caramelo). Hay alfajores y chilenitos. Estos últimos son más pequeños y a veces su base es una mezcla de harinas de trigo y maicena. Además, un bizcocho relleno que se llama brazo de la reina y miles de cosas ricas más. No olviden terminar sus fiestas con Concha y Toro Late Harvest, un vino de postre que refleja los rayos del sol y encierra en cada baya de uva la alegría y la dulzura del verano. 

Las Fiestas Patrias son una experiencia única y dice mucho de la cultura y mesa chilenas. Son sabores que nunca se olvidan, que cantan y bailan en el paladar.