En esta segunda entrega te contamos sobre la gran trayectoria en el mundo gastronómico de Isamel Lastra y Tomás Saldivia. ¡Entérate de todo más abajo!
María: ¿Cómo surgió tu pasión por la gastronomía?
Ismael: Mi pasión surgió el día que cociné para mi solo por primera vez y pude alimentarme de manera rica, creo que tenía 5 o 6 años. Me hice un huevo frito, comida que amo hasta el día de hoy, en una paila con harto aceite y que acompañé con una marraqueta. Ese día me llamó mucho la atención cocinar y ver lo que pasaba en un sartén.
Tomás: Mi pasión nace de los sabores, preparaciones de ricos almuerzos y comidas caseras con mi padre, madre y familia cercana.
M: Antes de ser cocinero, ¿qué pensaste que serías? ¿Tienes alguna profesión frustrada?
I: Estudié 4 años de periodismo en la UNIACC. Ser cocinero fue por poco mi carrera frustrada, pero la vida me condujo finalmente a mi sueño de vida.
T: ¡Por suerte hice lo que quise y no tengo profesión frustrada!
En aquel entonces me preparé e hice la prueba de admisión para el Culinary y además di la Prueba de Admisión Académica. Entré en Ingeniería química en la U. Adolfo Ibáñez pero sabía que no era lo mío. Hablé con mi padre, le dije que quería estudiar gastronomía y afortunadamente obtuve su completo apoyo.
M: ¿Quién te enseñó a cocinar?
I: Me enseñó mi abuela paterna, mi Mona, una señora capaz de alimentar un ejército con muy poco y de manera sabrosa. Siempre estaba a su lado cuando cocinaba. De hecho la principal salsa del restaurante es la de la Mona.
T: Las primeras personas que me mostraron el mundo de la cocina fueron mis papás. Con ellos aprendí el goce de cocinar, picar, cortar y meter las manos en la masa. Cocinar en paelleras, discos, parrillas y sartenes era lo más entretenido. Eso sí, lo que más amaba era ¡comer y comer! (risas)
M: ¿Prefieres salir a comer, eres delivery fan o cocinas en tu casa?
I: ¡Las tres! Me encanta salir y repetir cuando me gusta, soy Rappi adicto y también cocino mucho en casa.
T: Me encanta cocinar en mi casa. Es mi descanso, mi relajo y una gran instancia que disfruto en familia. Mis niños, Bruna y Santino, me ven cocinando, me ayudan y me preguntan cosas.. Mi señora, Ale, tiene un muy buen paladar, por lo que la tengo a prueba siempre. En ocasiones salimos a comer fuera para experimentar y ver otras tendencias gastronómicas.
M: ¿Qué ingredientes no pueden faltar en tu cocina?
I: Ajo, perejil, aceite del bueno y por supuesto huevos.
T: En mi cocina no falta la cebolla, ají de color, pimienta del canelo, comino, ajo y soy amante de los caldos naturales (con ellos juego y resalto preparaciones).
M: ¿Qué accesorio o utensilio no puede faltar en tu cocina?
I: La Thermomix (es un invento excepcional), una selladora, y un buen horno.
T: Peladores de varios tipos, saca bocados de distintos tamaños, buenos sartenes, moldes de todo tipo y tamaños y una buena minipimer.
M: ¿Cuál es tu destino gastronómico favorito en el mundo?
I: El País Vasco por lejos. España en general, pero Euskadi es la cuna…
T: Amo todos los destinos gastronómicos que puedan existir y que conozco, pero tengo tres en particular para mí, solo porque he vivido mucho tiempo en ellos y aprendí mucho: Perú, España e Italia.
M: ¿Qué productos compras en tus viajes para llevarte a casa?
I: Cuchillos e ingredientes locales.
T: Siempre compro aliños, condimentos distintos que no se encuentran fácilmente, o productos que desconozco. También cuando viajo por Chile, siempre me llevo producto local fresco o procesado por pequeños emprendedores y si no, lo cosecho yo mismo y me lo traigo a casa, para probar.
M: ¿Un plato inolvidable?
I: Las alubias pintas del País Vasco.
T: Costillar de cerdo con puré picante del restaurante “El Rancho de Doña María”.
Si quieres saber más información sobre Bodega 1883 by Áurea puedes ingresar en el siguiente link.