Comida Thai 

Una de las cocinas más complejas del mundo es la tailandesa. Sus recetas extremadamente diversas son capaces de entregarle al paladar, por separado o todos juntos a la vez, los gustos dulce, salado, ácido, amargo y umami. Además de los ajíes picantes, hierbas, especias aromáticas, raíces y leche de coco que dan origen a sus curries, con mucha profundidad y capas de sabores a cada plato. Por eso, se dice que es difícil encontrar el maridaje ideal. Mas, tomando en cuenta que históricamente los tailandeses no suelen beber vino con sus comidas. Pero ¿acabas de ordenar Pad Thai o Curry Verde de pollo? No te preocupes. Ya que la mayoría de los platos son a base de mariscos, pollo o cerdo, vinos blancos o rosados son excelentes opciones. O si los platos que pediste son muy picantes, es mejor un vino más dulce y que se sirva frío como el Riesling o Gewürztraminer para que mitigue el picor y las especias. Mientras que, para platos menos especiados como la Ensalada de Papaya Verde o Arroz Frito, Rosé Concha y Toro con su final fresco y mineral, es una gran compañía también.  

Burritos 

Este popular plato de la comida mexicana se cree que existe al menos desde 1900. Y si bien es muy similar a los famosos tacos, la diferencia es que su tortilla, en vez de maíz, es de harina. Por eso su sabor es más suave. Con diversas opciones de relleno, suele envolver queso, arroz, frijoles, guacamole y pico de gallo (salsa de tomate, cebolla y cilantro).  Además de los ingredientes que hacen la diferencia a la hora de buscarle un maridaje: la carne y diversas salsas. Si el burrito es relleno de carnes blancas como el pollo, un vino blanco con notas herbales como Terrunyo Sauvignon Blanc acompañará bien hierbas como el cilantro y también salsas de ají verde. Mientras que, con carnes rojas como Carne Asada, Gran Reserva Carmenere elevará tu experiencia, gracias a la presencia de taninos que ayudarán a limpiar tu paladar.

Fish & Chips  

¿Comerás frituras? ¡Pues bebe burbujas! Este es un maridaje indiscutido y aplica muy bien a este tradicional plato de la cocina británica. Ya que es una comida grasosa por la presencia del aceite, necesita de un vino de gran acidez que corte con la fritura para limpiar y refrescar al paladar. Por eso es común que lo sirvan rociado con vinagre. En este caso el espumante Casillero del Diablo Devil’s Collection Brut, con sus delicadas notas cítricas, toques de manzana y mineralidad, entregan una rica y balanceada acidez perfecta para maridar junto a esta preparación marina que se sirve junto a una porción de puré de arvejas. Como alternativa, un vino blanco sin madera también será un buen complemento.

Comida Peruana 

Muy popular en América Latina, aunque cada vez gana más presencia en Europa, la gastronomía peruana destaca por su gran variedad de ajíes y hierbas que aportan mucho sabor a cada preparación. Desde ají amarillo, limo, panca y rocoto, hasta hierbas como el huacatay, jugo de lima, carnes, mariscos, pescados, papas y arroz son la base de esta sabrosa cocina. En la cual el sabor umami suele estar muy presente por el uso del Ajinomoto (glutamato monosódico) y la salsa de soya, dada la influencia de las gastronomías japonesa y china, respectivamente. Es por esto que, para platos de mucha acidez como el Ceviche de pescado, se recomienda blancos cítricos y crujientes como Gravas del Bío Bío Sauvignon Blanc. Mientras que, para recetas criollas como Papas a la Huancaína o Causa (de pollo, atún o camarones con palta y mayonesa), Amelia Chardonnay con su estructura y mineralidad es un excelente vino para maridarlas. Para platos de carnes rojas muy sazonadas como Lomo Saltado o Anticucho de corazón, opta por vinos tintos como Gran Reserva Malbec.

Comida Turca 

Un maridaje un tanto desafiante, dada la gran cantidad de especias, carnes asadas y aceite de oliva, es el de la comida turca. Más allá de los conocidos Doner Kebab, hay varias preparaciones para llevar a casa, entre las que destacan las populares Hojitas de Parra (o Dolmas, rellenas de arroz, trozos de carne y limón), las Koftas (especie de croquetas de carne de cordero, cebolla, huevo y especias, asadas a leña), y como olvidar las Baklavas (hojaldres rellenos de pistacho, nueces y miel). Para los salados, un vino muy especiado que equilibra estos profundos platos es Carmín de Peumo de la cepa que se caracteriza por notas especiadas, la Carmenere. Mientras que para postres como la Baklava, Concha y Toro Late Harvest de la cepa Sauvignon Blanc con su final largo y fresco, serán el mas dulce final.

 

 

Ph: Lifestyle Asia Hong Kong